Desde Sabiñánigo hasta El Portalet, (frontera con Francia), en el Valle de Tena se entremezclan, la inigualable belleza de sus paisajes, bosques, lagos e impresionantes picos, con la típica arquitectura de alta montaña, así como la completa infraestructura turística que acoge al visitante, asegurándole una estancia agradable.
Con una amplia variedad de actividades, como los deportes de aventura, actividades náuticas, deportivas, excursiones, actividades culturales: Conciertos, espectáculos musicales, destacando el Festival Internacional de las Culturas, exposiciones y museos que hacen las delicias de grandes y pequeños en constante contacto con la naturaleza.
A partir de Biescas, la Ruta del Serrablo, conocida así por un grupo de 14 iglesias de los siglos X y XI, de estilo mozárabe y románico, constituyen un conjunto único. El museo de Dibujo del Castillo de Larrés (restaurado) y el Museo de Artes Populares del Serrablo, en Sabiñánigo, merecen una visita por su interés cultural y turístico.